Fr. Francisco Gómez Vargas y Fr. Dennis Tayo, Secretario y Animador, respectivamente, de la Secretaría General para las Misiones y la Evangelización, visitaron la misión en Camboya, acompañados por el Ministro Provincial de Vietnam y Fr. Michael Nguyen Xuan Duc, Guardián de la comunidad camboyana de Tuolkrasang.
La presencia franciscana en Laos y Camboya es la respuesta a la invitación del Ministro general en el 2009 para abrir una presencia internacional en estos países. En la reunión de la Conferencia de Asia Oriental (CAO) de 2010, celebrada en Hong Kong, los Ministros y algunos Secretarios para la Formación y para las Misiones y la Evangelización aceptaron esta invitación, invitando a los hermanos vietnamitas a iniciar esta presencia por razones de proximidad geográfica.
Camboya es un país del Sureste Asiático donde el 95% de sus 16 millones de habitantes son budistas. En las 3 diócesis hay aproximadamente 20 mil católicos, que son camboyanos, jemeres o vietnamitas. Dadas las tensiones étnicas provocadas por la guerra entre estas dos naciones en los siglos XVI y XVII, Fr. Michael afirmó que “la discriminación y el odio entre estos dos pueblos se sigue experimentando hoy en día”. Esto provocó una división entre los fieles vietnamitas y jemeres. Además, la mayoría de los católicos de Camboya son migrantes vietnamitas, pero no tienen documentos legales para vivir en Camboya. Por ello, la orientación pastoral general de la Diócesis es hacia la evangelización, especialmente de los camboyanos locales”.
Esta realidad representa un gran desafío, especialmente para los frailes vietnamitas que trabajan en la atención pastoral de 3 parroquias que atienden principalmente (99%) a fieles vietnamitas. Según Fr. G.B Dau Tien Dung, Párroco, “debido a esta tensión, la gente corriente del lugar no suele ser muy hospitalaria con nosotros, los sacerdotes vietnamitas, por miedo a que sólo nos ocupemos de los vietnamitas, aunque en realidad nos ocupamos de todos”. Otro reto es aprender el dialecto jemer. Por la experiencia de otras congregaciones no vietnamitas de Camboya, esto no parece ser un problema. Agradeceríamos mucho que hermanos sacerdotes no vietnamitas de otras entidades se unieran a nosotros aquí en Camboya.”
Junto con Anthony Tran Van Bien, Joseph Paul Roda Tuan y Joseph Nguyen Xuan The (que están viviendo su año franciscano), los frailes trabajaron principalmente en la atención pastoral de dos grupos: en primer lugar, el de los migrantes vietnamitas a los que no se ha concedido la ciudadanía camboyana y, por tanto, no se les permite trabajar en oficinas o fábricas, y que tienen hijos nacidos en Camboya a los cuales no se les permite ir a la escuela. En segundo lugar, los colonos informales jemeres camboyanos, principalmente jornaleros contratados, que viven de la pesca en zanjas, estanques y lagos, del prensado de botellas y de la venta de pequeños comestibles a domicilio.
Estas poblaciones pobres son atendidas por 2 guarderías pastorales con un total de 50 niños (35 jemeres y 15 vietnamitas) y 70 alumnos de primaria (cursos 1º y 2º), la mayoría de los cuales son niños jemeres pobres transportados diariamente a la escuela por nuestros hermanos franciscanos. Otros ministerios en curso para las familias jemeres son las becas, la construcción de viviendas y la ayuda económica periódica a ancianos y enfermos.
Para los frailes vietnamitas en Camboya, esperamos una mayor colaboración con otras Entidades, apoyo financiero en las actividades pastorales en curso y proyectos. Los frailes siguen trabajando en silencio con actividades de evangelización entre los camboyanos, al tiempo que ayudan a los inmigrantes vietnamitas a integrarse en la nacionalidad y la sociedad camboyanas, creando un puente de reconciliación entre estos dos pueblos, heridos por el pasado.
