Hoy a las 8:30 de la mañana, un extremista judío ingresó en la Iglesia de la Flagelación, sonse se encuentra la primera estación de la Vía Dolorosa, en la Ciudad Vieja de Jerusalén. El hombre derribó la estatua de Jesús y desfiguró su rostro. Tras ser sujetado por el portero del santuario, la policía llegó al lugar y lo detuvo.
Este es el quinto incidente que se produce en las últimas semanas. La semana pasada, unos turistas fueron agredidos por un grupo de judíos religiosos que entraron en la Puerta Nueva. Estos individuos cometieron actos de vandalismo en dicha entrada, cerca de la sede de la Custodia de Tierra Santa, arrojando sillas, mesas y vasos y transformando el barrio cristiano en un campo de batalla.
Hace unos quince días, un cementerio cristiano de Jerusalén fue objeto de actos de vandalismo, se escribieron grafitis con la inscripción “Muerte a los cristianos” en los muros de un monasterio del barrio armenio y se destrozaron locales utilizados como iglesia en el centro maronita de Ma'alot.
Seguimos con preocupación y condenamos enérgicamente esta creciente secuencia de graves actos de odio y violencia contra la comunidad cristiana en Israel. No es casualidad que la legitimación de la discriminación y la violencia en la opinión pública y en la actual escena política israelí se traduzca también en actos de odio y violencia contra la comunidad cristiana.
Esperamos y exigimos que el gobierno israelí y las fuerzas del orden actúen con decisión para garantizar la seguridad de todas las comunidades, asegurar la protección de las minorías religiosas y erradicar el fanatismo religioso, estos graves fenómenos de intolerancia, los delitos de odio y los actos de vandalismo dirigidos contra los cristianos en Israel.
Fr. Francesco PATTON, OFM, Custodio de Tierra Santa
Fr. Alberto Joan PARI, OFM, Secretario de Tierra Santa
Fr. Francesco Patton, OFM
Custodio de Tierra Santa
A todos los hermanos de la Custodia
Rondihna, Brasil, 2 de febrero de 2023
Fiesta de la Presentación del Señor en el Templo
Estimado Fr. Francesco, Custodio, y queridos hermanos de la Custodia de Tierra Santa,
¡Que el Señor os dé paz!
Os escribo en el día de la Presentación del Señor en el Templo, en el que damos gracias a nuestro Padre celestial por el don de la vocación a seguir las huellas de su Hijo obediente, pobre y casto, el Príncipe de la Paz.
He estado siguiendo de cerca el desarrollo de la situación en Israel y Palestina, y el acto de violencia que ha golpeado esta noche nuestra Casa de la Flagelación es una muestra de mi esta.
Estoy perfectamente consciente que vivir en esa bendita Tierra conlleva muchas exigencias y especialmente en estos momentos las dificultades se sienten más.
Debido a esto os quiero expresar mi cercanía, la de toda la Orden, y mis oraciones diarias por vosotros, por los pueblos que habitan Tierra Santa, por los que sufren la violencia, y también por los que levantan la mano para golpear a otros.
Encomiendo al Señor las víctimas, las familias afectadas y todos vosotros, queridos hermanos, que renováis vuestro sí de permanecer en esa Tierra, como lo han hecho los frailes desde hace ocho siglos.
Que el Señor os guarde en la respuesta misionera a nuestra vocación, en esa mansedumbre y fortaleza necesarias para seguir permaneciendo en los Santos Lugares, para interceder por todos y promover el precioso don de la paz.
Que la Bendición Seráfica sea vuestro consuelo y luz.
Fraternalmente su hermano y servidor
Fr. Massimo FUSARELLI, ofm
Ministro General
Prot. MG 20/2023